El nuevo Wolverine V2 Chroma tiene todo lo que se le puede pedir a un mando profesional de gaming con una excepción: no es inalámbrico
Los mandos de consola han avanzado una barbaridad en los últimos años, pero los que vienen con las consolas siguen siendo los modelos ‘básicos’. Si quieres algo más pensado para jugar como un profesional, tienes que comprar uno con palancas, más botones, opciones de personalización… Aquí es donde entra el Wolverine V2 Chroma, una nueva versión del mando de Xbox que lanzó la empresa de accesorios de gaming Razer hace relativamente poco y que ya de por sí era bastante cómodo y bueno.
Las principales diferencias que plantea el Wolverine V2 Chroma radican, por un lado, en la iluminación RGB, que es marca de la casa; y en las opciones extra de personalización, pues se pueden cambiar la altura de los sticks analógicos, la profundidad de los gatillos e incluye seis botones nuevos para realizar ciertas combinaciones que en un mando normal no son posibles. Por ejemplo, puedes configurar una de las palancas traseras del mando para que funcionen como el botón de salto del frontal. De esta manera, puedes saltar utilizando el dedo anular o corazón y no tienes que quitar el pulgar de la palanca de movimiento de la cámara para pulsar el botón frontal.
Esto puede sonar como una pijada, pero en videojuegos de disparos es algo fundamental que puede dar una ventaja táctica a los jugadores que desempeñan su ocio o su trabajo en ligas superiores, donde la competitividad se mida en las décimas de segundos que tardas en responder al empuje del enemigo. El Wolverine V2 Chroma tiene cuatro palancas traseras y dos botones extra en los hombros que se personalizan con el software de Razer para Windows 10 y permiten una gran personalización para este tipo de usuario. Y dado que todos los botones tienen un recorrido muy breve y la respuesta es instantánea, incluso no usando los extra, se puede conseguir una mejor respuesta en los juegos.
Es especialmente importante la posibilidad de acortar el recorrido de los gatillos traseros. Al mover unas pestañas justo bajo los gatillos, se puede acortar a la mitad la distancia cuando se dispara, por lo que también se reduce el tiempo de reacción en un FPS. Más allá de las características ‘pro’ del Wolverine V2 Chroma, valoro bastante su diseño bastante distinto del mando oficial de Xbox. Si tienes manos más pequeñas o el otro mando te resulta algo incómodo, puede que su forma más de plátano pueda beneficiarte.